- Manos arriba, esto es una encuesta. Usted a qué se dedica?
- Soy algonauta.
- El qué?
- Algonauta.
- Y eso qué es?
- Pues que siempre viajo en algo, unas veces en autobús, otras en metro...
- Oiga, pues yo también soy algonauta. E incluso diría que usted y yo hemos viajado juntos en algo, pero no recuerdo ahora... Ah, sí, ya lo tengo, coincidimos una vez en un taxi!
- No, eso sí que no, yo no viajo en taxis porque van llenos. Además, siempre hay alguien que intenta meterme mano.
- No me diga!
- Tendrían que hacerse redadas policiales en los taxis y limpiarlos de gentuza. Yo le mandaría a todos a galeras, que los azoten con saña.
- Perdone, que se me va el avión. Espere, señor piloto, espere...!
- Adios, adios...! - Una lágrima rodó por la mejilla derecha de Don Adelaido - Que pena, no le he pedido su teléfono. Podríamos haber quedado un día de estos para ir a tomar unas hostias a misa.
sábado, 3 de diciembre de 2011
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4 comentarios:
¡Como coincien las cosas!.... vengo despertando de un sueño con aviones... con viajes en algos, menos impresionistas y más... ¡espere chofer!.... pare, pare... lo siento te dejo, se me va la bicicleta con la que voy a ver a los miembros del PRO (Partido Relegado a la Oposición) que ahora radican en un barrio de clases medias entre "la nada y la cosa ni una", como veterinario, cumplo mi deber de entrevisarles.... o al menos eso quiero hacer... ¡espere chofer le dicen!
Por cierto: me ha gustado lo que escribes
Ah! el antiguo teatro del absurdo
Gracias, señor Atonau, por estas líneas de buen humor. Genial eso de "entre la nada y la cosa ni una"
Cordialísimos saludos!
El antiguo y eterno absurdo para provocar sonrisas, Don Jesús.
Mañanita de granizo y aguanieve en Manchester.
Feliz semana!
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