Agosto se va

Se va con sus calores, muchos calores, ¡tremendos calorazos!...

Se va con sus bosques arrasados y sus moteros muertos. Sangre joven sobre el asfalto, junto a motos descacharradas. Flamantes motos que lo eran en el escaparate de la tienda, quizá demasiado potentes para manos alocadas e inexpertas. Sólo en Murcia: seis moteros muertos en siete días.

Agosto se va dejando ahogados en las playas y africanos que vinieron a ahogarse a nuestras costas. Otros se salvaron pero queda la miseria, la repatriación, la indignidad...

En Agosto han campeado a sus respetos los pirómanos y los imprudentes, los locos y los maltratadores, los bichejos de la peor calaña y los políticos abyectos. Y hemos visto bomberos muertos y ciudadanos desolados sobre tierra calcinada.

Se va Agosto dejándonos muertos de gripe A y una gran sicosis de hipocondriacos y temerosos de todo.

Agosto nos soltó el demonio de ETA y otra vez hubo sangre en las calles, escandalosa sangre de inocentes. Todos somos inocentes menos ETA, aunque los irracionales crean lo contrario. Los alevines del Monstruo se esparcieron por las calles del Pais Vasco para estropear las fiestas.

En Agosto la casta más corrupta del país intentó demonizar a policías, fiscales, jueces y periodistas. Siguen en ello, amenazan con un "otoño caliente" Seguirán también sus tramas ilegales.

En Agosto se han llenado las playas, pero no todo dios llevaba los suficientes euros en el bolsillo.

Se va Agosto pero deja un mundo sin arreglar: mujeres pisoteadas en Afganistán y aquí mismo; pederastia laica y religiosa; banqueros enriquecidos con la crisis; futbolistas megamillonarios para deleite de los pobres; bebes arrojados a los contenedores; una Iglesia retrógrada sin voluntad de cambio; espectáculos sangrientos en la piel de toro...

Agosto se va pero viene Septiembre, y seguirán por aquí los hijos de puta de siempre.