lunes, 13 de diciembre de 2010

Observaciones

Un coche se detiene ante un paso de cebra y aguanta pacientemente a que pasen media docena de peatones que caminan sin prisas, e incluso tiene el detalle de esperar a una ancianita rezagada que tira cansinamente de su perro caniche remolón. No hay que asombrarse, es el coche de una autoescuela.

En un tramo del pasillo del autobús urbano al que acabo de subirme, camino por un alfombra de hojas de periódico gratuito. No están pintando el autobús por dentro, así que no hace falta cubrir el suelo con papeles. Debe de tratarse de una nueva moda.

4 comentarios:

NEKA dijo...

Si alguna vez voy en coche y veo una larga parada delante el paso de cebra, siempre pienso Uno de Autoescuela. Y de cada 5 dos si, el resto gente majilla que para.
Solemos a veces criticar lo despacio que va el de la autoescuela, nos ponemos nerviosos detrás y se nos olvida que un día nos vimos igual, y que cuando nos dan el carnet se nos olvida a todos las buenas maneras.
Un autobús con el suelo lleno de papeles bueno hojas de periódico, pues si no pintan un guarro que lo esparció, no tiene otra explicación.
Datos cotidianos amigo Obdulio
Besos de peatón

Obdulio de Oklahoma dijo...

Así es, todos pasamos por la autoescuela, pero la experiencia no nos sirve para comprender a los que están ahora. Se imponen nuestras prisas o la ridiculez de querer dar la impresión de que vamos con prisas y que ya nos lo sabemos todo en materia de conducción.
¡Besos de cebra feliz!

calimeroesmalo dijo...

Lo raro k nadie se acuerde de la familia del conductor del coche de la autoescuela, aqui pasa si hay muxa caravana, todo Dios pita y parece que nadie se acuerde que todos hemos pasado por eso , joder.
Y lo del autobús, es para tapar algo y a mi parecer y lo más lógico, algo desagradable.....
¡ Un abarzo!

Obdulio de Oklahoma dijo...

¡Coño, pues sí!... No había caído yo, igual es que alguien echó la pota allí, pero no olía.
El coche de la autoescuela, el viejito en bicicleta y el que reduce la velocidad para hablar por el móvil... son la alegría del tráfico rodado.
¡Abrazos!