Presos en el Camino

España, Abril de 2.125

Hace muchos años ya de la ruptura de la Iglesia y el Estado en nuestro país, pero aún quedan vestigios de un pasado religioso que son respetados escrupulosamente por su valor histórico y las múltiples obras de arte que nos ofrecen, principalmente antañonas iglesias y catedrales, tal es el caso del "Camino de Santiago"
No es el mismo Camino que conocieron nuestros antepasados durante el "boom de peregrinaciones" de finales del siglo XX y principios del XXI, pero aún se conservan tramos, (incluso calzadas medievales) albergues y bosques que ayudan a soñar a los más románticos manteniendo viva la vieja y saludable práctica del senderismo.
Y, al igual que en tiempos pasados, muchos centros penitenciarios permiten a sus internos "hacer el Camino" como ayuda a la reinsercción social y reducción de sus condenas.
Durante este mes de Abril nos ha llegado la noticia de que un grupo de presos "taurinos" caminan por la legendaria ruta en dirección a la ciudad del "Apostol"
Conviene informar a nuestros lectores más jóvenes sobre la identidad de estos presos:
Antiguamente existía una costumbre atroz en nuestro país: Con la disculpa de que era una tradición secular, se torturaban toros bravos en lugares públicos ("plazas de toros" las llamaban) siguiendo una especie de ritual en el que los ejecutantes, hombres vestidos con estrafalarios trajes ceñidos, burlaban al animal y le clavaban hierros y aceros haciéndole sangrar hasta la muerte.
Gracias al sentido común que se fue imponiendo, tan bárbara usanza cayó en declive y al final fue abolida por las autoridades.
Pero he aquí que ha surgido en nuestro tiempo un grupo clandestino de torturadores de toros empeñados en revivir tan odiosa "tradición". La policía tuvo sospechas de esta práctica delictiva y montó un gran operativo hasta dar finalmente con la "plaza de toros" subterránea en donde se celebraban las salvajadas. En la redada fueron detenidas 250 personas y puestas a disposición judicial, ingresando posteriormente en prisión, tras veredicto popular, los culpables directos de todo, cincuenta individuos entre los llamados "toreros" y resto de involucrados en la organización.
Y estos son, "toreros" y adjuntos a sus "torerías", los que ahora están caminando por la ruta jacobea en pos de una importante reducción de sus condenas y para ganarse el perdido prestigio social, cosa difícil dada la gravedad de su delito, pero una superstición santiaguera dice que "Santi hace milagros" (En desenfadada alusión al famoso "apostol" del culto católico)
Un historiador especializado en rituales crueles subraya la parte anecdótica del taurinismo criminal: "No entiendo lo de las plazas de toros "subterráneas", pues los antiguos practicantes del "toreo" construían plazas de toros al aire libre y le daban una importancia especial al hecho de que debía dar el sol en un sector de la plaza, mientras el otro permanecía a la sombra, ("los días soleados, por supuesto", matiza Don Críspulo Rodaballo) e igualmente existían las "corridas de toros nocturnas", pero eran menos"
Don Críspulo también ha salido al paso de los que sostienen que el Cid Campeador ya utilizaba metralleta, pero esta es otra historia.

¡¡Buen Camino, amigos peregrinos taurinos arrepentidos!!