martes, 7 de junio de 2011

El espíritu del maletilla

No era mi costumbre recoger autoestopistas, pero aquella noche hice una excepción porque no quería dormirme al volante y, a fin de cuentas, el muchacho no me parecía malo. Era un tipo sereno, poco hablador, del que sólo se traslucía su grandísima ambición por ser torero. Se le notaba en los ojos y en las pocas palabras que cruzamos. Qué raro, pensé, un maletilla haciendo auto stop en pleno siglo XXI, pero no dije nada. También me sorprendió que hiciese comentarios admirativos de mi coche. "Caray, parece un coche del futuro!", repitió varias veces.
De pronto, al salir de una curva, gritó: "Cuidado con ese coche!" Un coche acababa de realizar un adelantamiento temerario y venía directo hacia nosotros. Mi acompañante se percató un segundo antes que yo y eso me permitió dar un volantazo y evitar el choque frontal. Di varias vueltas de campana y quedé inconsciente por un tiempo.
Al recuperarme me percaté de que ya no estaba allí mi "copiloto". Lo busqué por los alrededores infructuosamente.
A la mañana siguiente informé del caso en el cuartel de la guardia civil de Valdivieso del Prat, y la respuesta que me dieron me dejó tan sobrecogido que aún no he salido de mi asombro. Me mostraron la fotocopia de un recorte de prensa de 1.961 en la que se veían varias fotos de "Currito Garcés" (mi acompañante de la noche anterior!... un joven de hacía 50 años!...) Dicho reportaje gráfico ilustraba una terrible noticia: "El joven aficionado al arte de Cúchares, "Currito Garcés" murió trágicamente en la tarde de ayer, en la plaza de toros de Valdivieso del Prat, al arrojarse al ruedo como espontáneo cuando acababa de salir por la puerta de toriles el segundo astado de la tarde, de nombre "Verdugo". Fue corneado repetidas veces y murió camino de la enfermería"
(Circula por ahí el bulo de que esto es una leyenda urbana, de que yo me lo inventado para sembrar el temor entre la gente supersticiosa. Les aseguro que el hecho es verídico)

3 comentarios:

Jesús dijo...

Que cosas pasas en esa extraña localidad, un caso mas para la nave del misterio de Iker Jimenez.

Obdulio de Oklahoma dijo...

Cierto, es una localidad con un nombre extrañísimo, a mi no me suena de nada.
Felices Pascuas, Don Director!

calimeroesmalo dijo...

Desde luego , suena a leyenda urbana... Un espontaneo no es la gente que estalla en llamas? jajajajajajaja..... Yo he oido una leyenda parecida de que si vas de noche con el toro de Osborne como pegatina en la parte de atrás y mirando al retrovisor dices " Rociíiiiiiiiiiito" 7 veces mientras bebes unos lingotazos de Pacharán , es muy probables que el espíritu de Ortega Cano haga que te esmoñes contra un precipicio... ( al menos la gente le echa la culpa a su fantasma).
¡ Un abracete!